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4/5/23 00:00

El valor de las personas en las empresas

Sabemos por qué es importante invertir en una nueva máquina o tecnología. Pero ¿cuánto aporta la confianza, la mejor calidad de vida y el compromiso de un trabajador a la rentabilidad de la empresa? ¿En qué invertimos cuando invertimos en las personas?

Autor: Ing. Agr Rocio Belda, Aapresid Certificaciones (AC)

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La primera responsabilidad social y de sustentabilidad que tienen las empresas es promover los deberes y derechos dentro de la organización. Cumplir con esa responsabilidad implica adoptar un modelo de desarrollo que plantee “ni hacia fuera”, “ni hacia adentro”, sino “desde adentro” de la empresa con la visión de empezar a medir sus resultados a través del cambio que generan en las personas.  

El crecimiento económico sin equidad social no es desarrollo, es sólo crecimiento, y en los modelos organizacionales donde los recursos humanos están excluidos es imposible impulsar el desarrollo. Allí es donde el rol de las empresas debe cobrar fuerza invirtiendo en las personas, mejorando la calidad de vida de los trabajadores y generando impacto en sus comunidades. No es una acción de solidaridad sino que es una acción de responsabilidad para con los propios empleados.

La Endo-Responsabilidad como modelo de desarrollo empresarial

“Hablamos de un desarrollo desde adentro de la empresa, valorando su propio capital humano que, en definitiva, es valioso en la medida que le pongamos valor agregado a su salario” destaca Graciela Salazar, fundadora, presidenta de la Cooperativa GENERAR. Para lograr ese Desarrollo Endógeno o Endo-Responsabilidad es clave trabajar en la confianza, y para ello es necesario involucrarse en el proceso educativo a fin de que cada empleado se corresponda con sus propias acciones. 

Cuando una empresa agropecuaria se instala en una comunidad rural, tiene el desafío de entender el proceso intercultural de esa comunidad para generar empleo con mano de obra local, potenciar las habilidades de los trabajadores invirtiendo tiempo y recursos, y devolver ese valor agregado a la comunidad, menciona la Licenciada en Trabajo y Gerencia Social y consultora ambiental. 

Las nuevas tecnologías se potencian con las habilidades y conocimientos de las personas involucradas; los trabajadores ya “no tocan botones” sino que integran procesos de desarrollo sustentables. 

En esa línea, los esquemas de certificación de prácticas sociales, ambientales y productivas sustentables son grandes aliados que toman cada vez mayor relevancia, tanto por iniciativa de las propias empresas como por clientes y sociedades cada vez más conscientes de estas cuestiones. El Agro no escapa a esta tendencia.  

Destinar recursos a promover el desarrollo es en realidad una inversión, ya que mejora la eficacia y la confianza de los trabajadores, lo que se traduce en mayor rentabilidad. 

¿Qué es la Rentabilidad de la Confianza?

“Una persona que duerme mejor tiene menos posibilidades de chocar una cosechadora de alta tecnología”, explica Salazar. Es decir, es posible medir la confianza y traducirla en rentabilidad cuando, por ejemplo, se disminuye el ausentismo de los lunes; los empleados participan de capacitaciones, entienden la importancia del uso de elementos de protección personal, replican esas conductas en su entorno personal, modifican hábitos de consumo y mejoran su capacidad de inversión, o cuando devuelven una sonrisa porque su trabajo fue reconocido. Esos resultados no se quedan solamente dentro de la empresa sino que se trasladan a su vida, sus familias y a la comunidad entera. 

El valor de la confianza en primera persona

Juan Carlos Cotella es dueño y fundador de Suri Yaco, una empresa agropecuaria que trabaja campos en Tucumán, sur de Salta y noroeste de Santiago del Estero, y que desde el 2002 trabaja activamente en el desarrollo de un ecosistema empresarial que le permita la vinculación proactiva con los pueblos y las comunidades de los que forma parte. “La generación de riqueza humana y trascendencia no solamente tiene que alcanzar a la empresa sino a los grupos de interés con los que actuamos: comunidad, contratista, arrendatarios, proveedores, clientes; esa es nuestra misión”, explica. 

Para Teddy, como todos lo conocen, es muy importante que todo el personal operativo que hace que la empresa funcione día a día, esté altamente calificado para la actividad que desempeña. Pero también es consciente de que mejorar la calidad de vida de los trabajadores va más allá del ámbito de la empresa y es necesario construir espacios de desarrollo en los pueblos donde residen porque, en definitiva, toda la actividad agropecuaria está estrechamente vinculada con las comunidades. 

En este sentido, la principal herramienta que tiene una empresa para el accionar sustentable es la toma de decisión. “Decidir sobre la visión de empresa que queremos, decidir un modelo de negocio integral desde lo económico, social, ambiental y comunitario, decidir sobre las buenas prácticas que generen mejora continua en los procesos y en las personas. El camino de la responsabilidad social y la sustentabilidad es por ahí”, asegura. 

Las certificaciones vienen a validar la aplicación de buenas prácticas en nuestra actividad. En el caso de Suri Yaco, cuentan desde hace años con la certificación Agricultura Sustentable Certificada (ASC) de Aapresid. ASC refleja los tres ejes de la sustentabilidad, mediante prácticas ambientales, sociales y agropecuarias, dentro de un Sistema de Gestión de la Calidad que le aporta transparencia, previsibilidad y mejora continua.

Las empresas que adoptan este tipo de certificaciones abren paso a un nuevo concepto empresarial que realza el valor de los recursos humanos. Sin embargo, según Salazar, “el único modo en que se pasa de una declaración de deseo a la concreción de una meta u objetivo es midiendo resultados, y eso nos lo da la certificación, pero primero tenemos que hacer las cosas bien”.

La rentabilidad de la confianza es intangible, no la podemos medir. Pero sí nos podemos preguntar ¿Qué hemos logrado con nuestras acciones? ¿Qué cambios provocamos en las personas? ¿Qué le aportamos a las familias, pueblos y a la sociedad?. 

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