31/5/23 00:00

Ámbitos laborales “cardio-protegidos”

El 70% de las muertes por paro cardíaco o muerte súbita ocurren fuera del ámbito hospitalario. Actuar de inmediato incrementa un 40% las chances de supervivencia. Capacitar al personal de las empresas en primeros auxilios salva vidas.

En Argentina hay 40.000 muertes por año por paro cardíaco o muerte súbita. El 70% de estas muertes ocurren fuera del ámbito hospitalario, es decir que nosotros mismos podemos ser los primeros socorristas en atender una emergencia de este tipo.

Conocer las maniobras de reanimación cardio-pulmonar (RCP) y actuar de inmediato incrementa en un 40% las posibilidades de supervivencia y en ello radica la importancia de las capacitaciones en el ámbito laboral. 

Hacer RCP salva vidas

“El RCP consiste en maniobras estandarizadas que cumplen o reemplazan la función del corazón y el pulmón hasta la llegada de un servicio de emergencias y que son aplicadas ante la sospecha de un paro cardiorrespiratorio”, explica Nicolás Chichizola Médico cardiólogo (Mat. 16823), especialista en Rehabilitación Cardiovascular y Pulmonar y coordinador de dicho programa en el Instituto Cardiovascular de Rosario (ICR) . 

De cada 100 personas, entre 5 a 10 logran sobrevivir a un paro, y por cada minuto que nos tardamos en activar las maniobras, dicha supervivencia cae un 10%. Por ello es tan importante educar sobre RCP.

“El ABC del RCP”

Para reconocer cuándo la persona está sufriendo un paro cardíaco, debemos seguir la Ley de las dos R: “si la persona no Responde y no Respira (o tiene una respiración agónica) tenemos que actuar lo más rápido posible, primero activando el servicio de emergencia y luego empezando con las maniobras sin detenerse hasta que llegue la ayuda de un desfibrilador, un médico, la ambulancia o hasta que la persona recobre la conciencia”.

Lo ideal es hacer la RCP sobre una superficie rígida. Con ambos brazos extendidos se apoya el talón de la mano en el centro del pecho y se empiezan a realizar las compresiones a una profundidad de 5 cm y con un ritmo de entre 100 y 120 por minuto sin detenerse en ningún momento. 

“Una forma de recordar el ritmo con que debemos realizar las compresiones, es cantando y coordinando los movimientos con el tema Stayin' Alive, de los Bee Gees”, menciona Chichizola.

RCP en ámbitos rurales

En ámbitos rurales, conocer sobre ésta y otras maniobras de primeros auxilios es fundamental, ya que en muchos casos por distancias o por falta de caminos adecuados, la ayuda puede demorar en llegar. 

La Ley 27.159 art. 11 obliga a las empresas que cuenten con protocolos de emergencia y un plan de capacitaciones que incluyan la enseñanza de esta maniobra. Esto compete, desde luego, a las empresas agropecuarias. 

En este sentido, los esquemas de certificación de buenas prácticas ayudan a las empresas a estar al día con la legislación y a incluir estas capacitaciones en planes ordenados y efectivos. Es el caso de la certificación insignia de Aapresid, Agricultura Sustentable Certificada (ASC), que en su protocolo obliga a los productores que deseen contar con este sello a incluir capacitaciones en RCP y primeros auxilios dentro de un plan de capacitaciones. 

“Este requisito no solo tiene que ver con la importancia de que cualquier empresa del rubro cumpla con la legislación, sino que está en la esencia de una certificación de sustentabilidad”, explican desde el Programa Certificaciones de Aapresid.

“La sustentabilidad de ASC incluye los ejes ambiental (exigiendo a las empresas certificadas prácticas de cuidado de los recursos naturales), económico (alentando a las empresas a optimizar la eficiencia en la gestión y ofreciendo oportunidades de negocio específicas) y social”. 

“En cuanto a esto último, es condición ‘sine qua non’ para una empresa que desee contar con nuestro sello, asegure prácticas de cuidado y bienestar de las comunidades con las que se vincula en su territorio, así como de los empleados que allí trabajan. Estas capacitaciones están en línea con ese objetivo”, concluyen desde AC.